Reseña
Cortometraje; La ultima función.
La trama se desarrolla completamente en una sala de cine,
comienza con el ingreso de lo que parece ser un hombre común, trabajador de
apariencia un poco desalineada y sucia, de corbata y saco haraposo, con una
carpeta en mano, quizá contador o vendedor de seguros; su cara denota una
expresión de preocupación y angustia, quizá con la esperanza de olvidarse de
sus asuntos ingresa al cine. Al entrar, encuentra una sala enorme de precarias condiciones y aparente mente
vacía, sin embargo tras avanzar mas dentro de la sala, observa varias personas,
de apariencia común, y de actitudes cotidianas, algunas entusiasmadas con la
proyección, otras mas ocupadas en sus roles demasiado tipificados. Tras pasar
varias hileras de asientos finalmente el intrigante vendedor de seguros se
sienta pero no sin antes voltear a todo lo largo de la sala, como si en busca
de algo estuviese o quizá tan solo una premonición del peligro que siente por
venir. Toma asiento, sentado ahí, observa la película, finalmente le gana el
sueño y cuando despierta esta ya a terminado.; Es tiempo de salir de la sala
sin embargo pasa algo inusual, las puertas se encuentran bloqueadas, tras la
sorpresa de la gente parece no haber ningún trabajador del cine, entran en
desesperación; gritan, golpean la puerta, y sin embargo no obtienen respuesta,
el vendedor de seguros no parece desesperado pues aun a piensa que seguro es
una falta administrativa, que mas se puede esperar de ese sucio y descuidado
cine. Finalmente una de las puertas es abierta, de ella se asoma un sujeto,
aparenta ser el gerente o al menos el encargado. Pide a todos que formen una
fila y salgan ordenada mente, tras salir encuentran a varios hombres sentados
frente a una larga mesa en la salida del cine, estos hombres piden que pase uno
por uno de los asistentes al cine hacia la larga mesa, todos parecen asombrados
y creen que es un interrogatorio porque posiblemente son policías y están en
busca de un ladrón.
Pasa uno y otro, y todos a excepción de uno, son enviados al
segundo piso del cine. Todos se encuentran desconcertados ante la aparente
arbitrariedad, finalmente le toca al vendedor de seguros, desconcertado se
acerca a la gran mesa con tres hombres sentados, tras estar lo suficientemente cercas,
uno de ellos le pide que dibuje un león, intrigado el sujeto pide que le repita
lo que dijo, y se lo repite “dibuje un león”, este no lo comprende que relación
tenga un interrogatorio con dibujar un león, finalmente tras regañadientes lo
dibuja, el sujeto en la mesa observa detenidamente su creación, hace un
movimiento con la mano e inmediatamente es conducido al segundo piso el sujeto
autor del león. Al subir las escaleras el vendedor de seguros parece saber del
peligro que esta por venir, lo denota su rostro; se abre una puerta y están en
el palco de la sala de proyección donde minutos antes se encontraban viendo la
proyección. Observa los mismos sujetos que se encontraban en la fila, ahí
están, pero hay algo inusual, están sentados ahí pero demasiado quietos, sus
miradas se encuentran perdidas y no precisamente hacia la proyección, por ultimo hay algo viscoso que escurre de sus
cráneos; el vendedor se da cuenta, pero es demasiado tarde, su fin ha llegado.
Critica
Este pequeño cortometraje de misterio y suspenso, en el que
los nombres de los personajes parece irrelevante, y lo es en verdad, con apenas
un dialogo estructurado, la trama de la película se desarrolla casi en su
totalidad en pequeñas acciones y gestos, acciones tan meticulosas y detalladas,
gestos tan articulados y exagerados, que en conjunto salen del comportamiento y
respuesta de la vida real. Quizá se exagero un poco en prolongar el suspenso,
que incluso en un momento dado se vuelve aburrido y finalmente decepcionante
por el flojo desenlace, predecible hasta cierto punto e incomprensible del
todo.
por: Alejandro Avalos y Christopher A. Guzman Audelo.
